jueves, 26 de febrero de 2009

de tetas y puños


La solidaridad de género no es característica de los sectores AB, allí lo que predomina es la solidaridad de clase. Con el triunfo de dos mujeres peruanas en la escena internacional ambas pertenecientes a los sectores AB, se ha desatado una especie de euforia mediática. También he visto comentarios en redes sociales tipo facebook y amigas peruanas en el extranjero han hinchado el pecho de orgullo por Claudia Llosa y Kina Malpartida. Estoy tentada de hacer una rápida encuesta con mujeres de sectores CDE sobre el triunfo de estas peruanas. Me gustaría comprobar que el fenómeno a la inversa no se da. Es decir, que la solidaridad de género sí existe en esos sectores populares y no sólo eso, sino que supera las barreras sociales. Me gustaría saber si las mujeres de la teta asustada, y las hijas de las mujeres de la teta asustada ven el triunfo de Claudia Llosa como el triunfo de una mujer peruana. Si se sienten representadas. Si las mujeres víctimas de la violencia en todas sus formas, sexual, psicológica, urbana (baste con viajar en micro para saber a qué me refiero), en fin, de todas las violencias habidas y por haber, si esas mujeres desearían enfundarse en los guantes de la Malpartida para arremeter a puñetazos contra el mundo y superar sus frustraciones. Cómo saber la forma en que ellas, -las emergentes -las emprendedoras -las micro-empresarias - las empleadas del hogar - las ambulantes - las trabajadoras sexuales - las barrenderas –las policías - las lavanderas - las cobradoras - las cajeras - las peluqueras - las heladeras, las etcétera - perciben a Kina, a Claudia, a la teta, y al puño? ¿Qué sensaciones las embargarían en una sala de cine o en un cuadrilátero? Si perciben ese mérito como cosa de pitucas en un mundo que no es de ellas, o simplemente, no lo ven. Me muero de curiosidad por saber si Magaly Solier provoca algún tipo de identificación en mujeres de Lima Norte o Lima Sur (ojo que aquí no me refiero a Ancón ni a Eisha, si no a los mal llamados “conos”).
Estando en la playa mi hija y sus amigas se preparaban para un concurso de postres. Buscaban un nombre para caracterizar sus suspiros y arroces con leche. La tía de una de las niñas les sugirió sweet heart. Por supuesto yo retruqué, y por qué no misky sonqo que es lo mismo pero en Quechua? Contra todo pronóstico no me pusieron cara de asco. No tuvieron la reacción burlona de las de mi generación frente al tawa canal limamanta pacha. Me preguntaron sobre el significado pero sobretodo se sorprendieron genuinamente: tía, ¿y tú por qué sabes Quechua? Nada más lejano y menos identificable para sus oídos pre-adolescentes, -tan acostumbrados al suave seseo del inglés- que las guturales “k” y “q” (suenan como a “j”) de la lengua de las tetas asustadas. Pero hablando de lejanías, nada más lejano también que el box, baste la siguiente pregunta para intuir su percepción: mamá, ¿Kina es gay? Ah los estereotipos!!! Y yo que pensé que era la portaestandarte de una educación gender-sensitive, gay-friendly, open-minded?
Si los traumas se transmiten por la leche materna – tesis de la película de la Llosa – los estereotipos los refuerza la sociedad. Yo le dí de lactar a mis 3 hijos, algo cada vez menos inusual felizmente hoy en día, pero no demasiado extendido en la época en que me estrenaba como madre. Por supuesto, una práctica maravillosa que las mujeres andinas asumen con la naturalidad con la que en Lima se preparan los biberones. A mi pequeña la amamanté por un año. Raro también que las madres-trabajadoras extiendan el periodo de lactancia por tanto tiempo. Espero que mi leche la haya inmunizado contra las taras y prejuicios sociales que ella deberá enfrentar. Ya le tocará decidir qué cara poner cuando las amigas se refieran a la empleada como la “maid”, si quedarse callada o cuadrarlas en one. También espero que su espíritu solidario se siga fortaleciendo, sin mediar sentido de pertenencia a clase alguna, pero exacerbado por su condición de mujer.
Quisiera, y esto es wishful thinking, que las más de 500 mujeres violadas durante el periodo de la violencia política, sus hijas, sus nietas, pudiesen romper ese círculo de dolor. En buena cuenta, que términos como el de “teta asustada” se quedasen sin referente en la vida diaria, que sólo fuesen ficción. Lamentablemente no es así. Y si no fuimos capaces de condolernos con la purita realidad, espero que en una sala de cine la conciencia nos golpee sin miramientos.

sábado, 14 de febrero de 2009

corners of my life...


Hay tareas fáciles y otras difíciles. Sin embargo, he llegado a la conclusión que el grado de dificultad es totalmente subjetivo. Me rectifico, no hay tareas fáciles o difíciles, lo que hay es personas con habilidades o personas sin habilidades. Ahora, las personas con habilidades 360 deben ser escasas, creo que no conozco a ninguna. Abundan las de habilidades 180, es decir, buenas en números y no en letras o a la inversa. Los intelectuales o los deportistas, etc.
La mayoría de los seres humanos desarrollamos capacidades, dependiendo de una serie de factores, motivación, ambiente propicio, habilidades innatas, necesidad, etc. Otros pocos son los “gifted” los que nacen con un don que les es inherente, que los acompaña sin mediar más que la gracia divina o la buena estrella.
También he leído por allí que el potencial que guardamos es inconmensurable, y que debido a la ley del menor esfuerzo, sólo utilizamos lo que es estrictamente indispensable. ¿Será?
Entonces me pregunto, ¿qué lleva a algunos elegidos a desafiar los límites, situarse al extremo y exigirse al máximo? Hoy leía un artículo sobre el “hombre araña”, un escalador francés dedicado a trepar edificios, por el simple hecho de retarse a sí mismo. Pero no se trata de edificios de 20 o de 30 pisos, se trata de rascacielos de hasta 400 metros de altura! Este ser pequeño (en estatura) y gigante en sus propósitos sufrió una caída desde 20 metros de altura, que hubiese matado a cualquier otra persona o la hubiera postrado en cama por el resto de su vida. Este no es el caso. ¿por qué? Él dice que por coraje.
Imagino que el coraje o la valentía o la necesidad de demostrarlos pueden ser razones tan válidas como cualquier otra. Pero así como no hay tareas fáciles o difíciles, tampoco existen razones válidas o no válidas.
¿Quién gana un Premio Nóbel? ¿quién llega a la luna? ¿quién inventa Internet? ¿quién danza como las mariposas? ¿quién compone la novena sinfonía estando sordo? ¿quién sueña con submarinos? ¿quién se inocula un bicho para descubrir una vacuna? Quién, quién, quién…
Talentos y dificultades, dificultades y talentos… ¿y las razones? Un romántico dirá por amor, un racional dirá por practicidad, un cínico dirá por conveniencia, un envidioso dirá por suerte, un escéptico dirá por azar, un religioso dirá por obra divina y un ateo dirá por que las condiciones estaban dadas, etc. etc. etc.
A veces, sumidos en nuestras miserias cotidianas nos sentimos tan especiales por los pequeños logros que vamos a duras penas consiguiendo. En eso llega un hombre araña para estrellarnos de frente, cara contra el asfalto.

martes, 10 de febrero de 2009

Solidari qué: bake sale en Miraflowers...


A mi vecino se le incendió su casa. A mi hija se le prendió el foco. A mi se me activó la capacidad de respuesta. Pero todo quedó en un connato. Qué paso? Mi vecino es el guardián del edificio contiguo a mi casa. Un corto circuito lo dejó sin nada. Bueno, sin lo poco que tenía, es el guardián del edificio, y como comprenderán, en un cuarto de 3 por 3 no entran muchas cosas, además de él, su bella esposa y maravillosos niños. Vamos a hacer algo, dijo Bía, pero qué?? una colecta, no creo que mueva a nadie. Genera desconfianza eso de que te pidan dinero, y además, para ser honesta, no conozco a mis vecinos, ni un poquito. No sé como se llaman, ni a qué se dedican, ni cuántas personas viven en sus cómodas casas, ni si están al día en sus cuentas, ni si son píos, porque como no voy a misa, si ellos van, jamás me enteraré. Postres!!! dijo Bía, OK, un bake sale en Miraflowers, suena bien, si estuviera en Villa el Salvador o en Comas haría una pollada, una cuyada, o cualquier ada, pero como es Miraflowers, como que no pega no??? o sea, los vecinos me mandarían a serenazgo en un triz, y el propósito de la acción quedaría anulado. Venta de postres, sale! Una semana de anticipación, Bía con ayuda de su hermano mayor diseñaron unas invitaciones muy bacanes, contando brevemente el caso, sin lamentaciones pero motivando a la gente a colaborar. María y su tía Doña Nico, prepararían las delicias, Tata, decía que no iba a alcanzar, que los vecinos iban a llegar a comprar con fuentes, y la verdad el entusiasmo nos embargó a todos. Llegó el gran día de la venta, y que creen que pasó? De 38 invitaciones a vecinos, vinieron 3, sólo 3!!! Los postres se vendieron a las empleadas, sí señores, a las empleadas, al sastre, al verdulero, esa mi gente!!! será por eso que me identifico tanto con ellos?

Eso sí, hay excepciones, llegó la mamá de un amiguito de Bía, en su carro, con chofer/guardaespaldas, y los 3 sesentaron a degustar democráticamente en el jardincito de la entrada de mi casa. Parece que eso atrajo gente, y algunos transeúntes se animaron a parar. Lo primero que se acabó, el arroz con leche que preparó Denise, la enamorada de Renato, otro corazón sensible. Luego la mazamorra morada. Pero nos quedamos como con 3 postres enteritos, no por mucho tiempo claro, los amigos de Salva se encargaron de darles vuelta en la playa antes de que termináramos de descargar el carro. Ah por supuesto Cesarolo, descendió a los infiernos y trajo a Satanás y a su novia, su presencia fue un aliento, como el de ángeles caritativos y hambrientos! Al día siguiente llamamos a Claudia para entregarle el sobrecito. No era mucho, no lo sé, cómo medir la magnitud de nuestros actos, buenos o malos? Me contó que los vecinos de su edificio se le fueron encima el día mismo del incendio, la recriminaron por haber puesto sus vidas en riesgo e intentaron botarla, dios, perdónalos porque sí saben lo que hacen!!! Bía me miraba, sus ojos abiertos, su corazón abierto, sus manos abiertas... espero que nunca se cierren.