martes, 10 de febrero de 2009

Solidari qué: bake sale en Miraflowers...


A mi vecino se le incendió su casa. A mi hija se le prendió el foco. A mi se me activó la capacidad de respuesta. Pero todo quedó en un connato. Qué paso? Mi vecino es el guardián del edificio contiguo a mi casa. Un corto circuito lo dejó sin nada. Bueno, sin lo poco que tenía, es el guardián del edificio, y como comprenderán, en un cuarto de 3 por 3 no entran muchas cosas, además de él, su bella esposa y maravillosos niños. Vamos a hacer algo, dijo Bía, pero qué?? una colecta, no creo que mueva a nadie. Genera desconfianza eso de que te pidan dinero, y además, para ser honesta, no conozco a mis vecinos, ni un poquito. No sé como se llaman, ni a qué se dedican, ni cuántas personas viven en sus cómodas casas, ni si están al día en sus cuentas, ni si son píos, porque como no voy a misa, si ellos van, jamás me enteraré. Postres!!! dijo Bía, OK, un bake sale en Miraflowers, suena bien, si estuviera en Villa el Salvador o en Comas haría una pollada, una cuyada, o cualquier ada, pero como es Miraflowers, como que no pega no??? o sea, los vecinos me mandarían a serenazgo en un triz, y el propósito de la acción quedaría anulado. Venta de postres, sale! Una semana de anticipación, Bía con ayuda de su hermano mayor diseñaron unas invitaciones muy bacanes, contando brevemente el caso, sin lamentaciones pero motivando a la gente a colaborar. María y su tía Doña Nico, prepararían las delicias, Tata, decía que no iba a alcanzar, que los vecinos iban a llegar a comprar con fuentes, y la verdad el entusiasmo nos embargó a todos. Llegó el gran día de la venta, y que creen que pasó? De 38 invitaciones a vecinos, vinieron 3, sólo 3!!! Los postres se vendieron a las empleadas, sí señores, a las empleadas, al sastre, al verdulero, esa mi gente!!! será por eso que me identifico tanto con ellos?

Eso sí, hay excepciones, llegó la mamá de un amiguito de Bía, en su carro, con chofer/guardaespaldas, y los 3 sesentaron a degustar democráticamente en el jardincito de la entrada de mi casa. Parece que eso atrajo gente, y algunos transeúntes se animaron a parar. Lo primero que se acabó, el arroz con leche que preparó Denise, la enamorada de Renato, otro corazón sensible. Luego la mazamorra morada. Pero nos quedamos como con 3 postres enteritos, no por mucho tiempo claro, los amigos de Salva se encargaron de darles vuelta en la playa antes de que termináramos de descargar el carro. Ah por supuesto Cesarolo, descendió a los infiernos y trajo a Satanás y a su novia, su presencia fue un aliento, como el de ángeles caritativos y hambrientos! Al día siguiente llamamos a Claudia para entregarle el sobrecito. No era mucho, no lo sé, cómo medir la magnitud de nuestros actos, buenos o malos? Me contó que los vecinos de su edificio se le fueron encima el día mismo del incendio, la recriminaron por haber puesto sus vidas en riesgo e intentaron botarla, dios, perdónalos porque sí saben lo que hacen!!! Bía me miraba, sus ojos abiertos, su corazón abierto, sus manos abiertas... espero que nunca se cierren.


8 comentarios:

Anónimo dijo...

Llama la atención la actitud de tus vecinos, pero ¿cómo no entenderlo? si en barrios como los nuestros la gente vive paredes para adentro, con todas sus comodidades. Los peligros reales o ficticios hacen que neustros hijos no pasen más tiempo en la calle como lo hicimos nosotros cuando eramos chicos. Total, pasamos de los 4 paredes de la casa, al club de GCU, al colegio donde tampoco sabemos mucho de la gente, etc., etc. Esta cultura de la desconfianza mata la solidaridad. tendría que haber un terremoto o maremoto que nos afecte a todos para empezar a darnos cuenta que necesitamos tanto de los otros, y que ser prójimo supone "aprojimarnos", es decir, aproximarnos. Iniciativas como la tuya vale más que cualquier curso de valores en el coleo cualquier sermón en la Iglesia (¿recuerdan la historia del samaritano?)
Saludos
Fer

Ebam dijo...

ah si, de hecho q el ejemplo es lo único q les legaremos a nuestros críos...ojalá que la semilla caiga en tierra fértil y que ellos y ellas lleguen más allá de lo que pudimos hacerlo nosotros. gracias Fer, como siempre.

Anónimo dijo...

Ay Tia...no le pidas peras al olmo...hace rato me olvide de estos segmentos...por eso me gusta estar mas en la Selva que en Lima...

Anónimo dijo...

hey, next time, avisa para caer por ahí... por cierto, la solidaridad es un bien que escasea mucho últimamente... a veces quien menos tiene, es el que más da... por qué? quizás porque entiende en carne propia lo que es la necesidad y desarrolla más la empatía con el prójimo/próximo necesitado... naturalmente, ésta no es excusa para justificar la falta de solidaridad en esos "otros segmentos".

Ebam dijo...

eso es! no me quedó nada de la clase de márketing social y me olvidé por completo de segmentar a mi público...ohh...fuera de bromas, eso de los segmentos es más cierto de lo que pensaba, y de hecho más que segmentos parecen compartimentos estancos entre los cuales no existe comunicación alguna...gracias por recordármelo...

Cesarolo dijo...

Desde que me contaste la idea y su concepción estaba más que animado y determinado en colaborar... Qué genial que Beatriz tenga ese emprendimiento (del que tanto hemos hablado en nuestra tesis) qué genial...
Satanás y Marichan estuvieron muy emocionados para colaborar y, a pesar que se terminaron el arroz con leche que no llegué a probar, los llevaré cuando ocurra otra genialidad de estas...

Ebam dijo...

sí partner, la próxima vez definiremos mejor el producto, de hecho más arroz con leche, receta de Denise, y sí sabemos que podemos contar contigo, no hasta dos, no hasta tres, sino contar, como se cuenta con los amigos!

Paola Vicente dijo...

Pero Mabe que falta de confianza con tus patas de la embajada, si los postres son nuestra perdición!!!!! (me incluyo como grupo, pero me excluyo como sweet teeth aunque muero por el arroz con leche mmmmm). Para tu proximo plan de marketing incluye el delivery, facil que así hay mas respuesta (pa comodones los limeños)